Rolls-Royce 40/50 Silverghost
|
Charles Stewart Rolls era un importante empresario automotriz de comienzos de siglo, encargado
de importar hacia Inglaterra autos de lujo franceses como Clémens, Panhard, Mors y Minerva. En
1902, tiene conocimiento de un pequeño fabricante de automóviles de lujo que se había ganado
fama por sus modelos muy bien construidos dejando siempre a sus clientes satisfechos. Se llamaba
Frederick Henry Royce.
Rolls toma contacto con Royce y éste último le entrega unos cuantos modelos para su análisis.
Satisfecho Rolls, dejó de lado su importadora y se une a Royce para formar una empresa de autos
de lujo. En 1904, con el slogan de "el mejor coche del mundo" se crea la Rolls-Royce Co. en
Manchester, cuyo símbolo era una "dama volando" sobre el capó, que representaba el éxtasis.
Royce emplearía toda su experiencia mecánica en construir los autos y Rolls toda su logística y
contactos para venderlos. El primer modelo, el 30 CV, fue todo un éxito. La nueva marca ya
traspasaba las fronteras haciendo honor a su adjetivo, y los sólo la clase más acomodada podía
adquirir estos lujosos pero carísimos autos. Con el "Silver Ghost", la marca llegó hasta los
países árabes. En 1908, fundaron una nueva fábrica en Derby. Pero Charles Rolls no pudo seguir
con la empresa al morir trágicamente dos años después. En 1931, buscando la expansión, se
compra la Bentley Motors, empresa que hoy es considerada la prima hermana de Rolls-Royce; y
para 1939, se adquirió la carrocera Mulliner Park Ward Limited.
Con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, muchas fábricas inglesas fueron conminadas a
construir material bélico. Rolls-Royce se encargó de la construcción de motores para aviones.
La calidad de esta maquinaria fue tan buena como sus autos, y el éxito es tal que hasta ahora se
construyen motores de avión. Incluso más de un osado intentó romper la barrera del sonido con
motores y turbinas de avión de la marca de Manchester.
Rolls-Royce Silver Shadow
|
En los años cincuenta, los Rolls-Royce sólo podía ser comprados por los más altos representantes
políticos de los países más poderosos sólo por cuestiones de imagen. Y según los entendidos,
"el mejor coche del mundo" alcanzó su máxima expresión con el inigualable Silver Cloud. Pero la
crisis del petróleo afectó mucho a la fábrica años después, teniendo que "extender" su mercado
al aceptar como compradores a los simples mortales pero con un buen fajo de dinero en manos. En
1971, se forma una nueva compañía: Rolls-Royce Motor Cars Ltd. Esto significó la desvinculación
con la división de motores para aeronaves. Luego empezaría la crisis económica que casi lo llevó
a la quiebra.
A pesar de que la clase y el lujo característicos de la marca no se perdieron, era obvio que ya
no podía mantenerse por sí solo. De tener fábricas tanto en Inglaterra como en Estados Unidos,
Rolls-Royce terminó atrincherándose en su fábrica en Crewe. El grupo Vickers, el dueño de la
marca a principios de los noventa, no pudo levantar la crisis financiera que estaba por consumir
la marca. Así, en los noventa las ventas cayeron en más del 50% y ya muchos pensaban en su
innminente bancarrota. La mecánica no había variado mucho en los últimos 40 años y por más
lujosos que fueren no podía competir contra los superlujosos modernos. A Vickers no le quedó
otra que vender a la marca para no perderla para siempre.
Así, los imperios automotrices Volkswagen y BMW fueron los interesados. Luego de varias
controversias, Rolls-Royce Bentley Motorcars pasó a manos de Volkswagen en 1998; pero con una
cláusula muy beneficiosa para BMW que le daba el derecho de reclamar la firma Rolls-Royce para
el 2003. De esta manera, con Volkswagen para Bentley y Rolls-Royce para BMW, ambas empresas
serán separadas luego de 72 años. Aparte, la fábrica de Crewe quedará solo para la construcción
de Bentleys, mientras que para la empresa de "los mejores autos del mundo" le espera una moderna
planta en Goodwood, al sureste de Inglaterra.
Rolls-Royce ya no corre peligro, y por el contrario, volverá a su época de máximo resplandor
como constructor de autos superexclusivos dignos de los personajes más poderosos del mundo.
|
|