Este auto de lujo con aspecto de tiburón fue producido entre 1964 y 1966, haciéndose sólo 36
unidades. LLeva un motor V12 de 4963 cc y 400 HP de potencia, con una caja de cambios de cuatro
velocidades más overdrive que permite llevar a este monstruo hasta los 280 km/h.
La suspensión delantera independiente y los frenos de disco para las cuatro ruedas son los
responsables de la seguridad de este coche, que, se convirtió en uno de los modelos más sobrios
de la historia de Ferrari.