Sus líneas elegantes y seductoras no pueden ocultar sus brillantes prestaciones mecánicas para
la época. Para llevar al Delahaye hsta los 135 km/h, tiene un motor de seis cilindros en línea
de 3.5 litros con tres carburadores; con una potencia de 95 HP o 135 HP en la versión de
competencia.
Y aunque no lo aparenta, este auto ganó varios Grandes Premios, las 24 Horas de Le Mans y el
mítico Rally de Montecarlo. Una verdadera elegancia con espíritu deportivo lo hacen uno de los
mejores autos construidos en su tiempo.